Las inmensas soledades de algunos de los parajes de la Mancha -no olvidemos que esta región experimenta una de las densidades de población más bajas de España -han hecho agruparse a sus habitantes en grandes centros rurales, separados entre sí por extensos espacios de tierras prácticamente deshabitadas. Visitando los pintorescos lugares de la región, se va calando y apreciando su cultura, esa cultura hidalga y rural al mismo tiempo, que salvando particularidades, es patrimonio común de muchas otras tierras de España. Y una cosa está clara: que estas gentes, a lo largo de los siglos, han llegado a un profundo y sereno conocimiento de sí mismas. y éste es, según nos explica Cervantes, "el más difícil conocimiento que pueda imaginarse". ¿Y la mujer manchega? ¿Cómo es la mujer de estas
tierras? Su incorporación al trabajo remunerado en igualdad de |